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La planificación del embarazo es un momento crucial en la vida de una mujer porque es verdaderamente una inversión en la salud de su feto, su hijo y la próxima generación. Pero sorprendentemente, alrededor del cincuenta por ciento de los embarazos no son planeados. Eso significa que la salud de las mujeres en todo momento, a lo largo de su vida, debe optimizarse.
¿Cómo tenemos éxito? Una mujer necesita ejercicio, una dieta saludable, optimización tanto del bienestar físico como mental, control de cualquier enfermedad subyacente, vacunas, ADEMÁS de unsuplemento vitamínico prenatalque contenga la cantidad correcta deácido fólico, tomado diariamente para que si y cuando concibe, esté preparada para el embarazo.
La ciencia nos muestra que tomar ácido fólico antes de la concepción disminuye el riesgo de defectos graves del tubo neural (espinal) y cardiacos y puede proteger contra los trastornos del neurodesarrollo.1
El Programa Preconcepción a la Infancia (P2ITM) equipa a los proveedores de atención médica con herramientas y conocimientos innovadores para abordar las complicaciones del embarazo y las enfermedades crónicas de la infancia, creando beneficios duraderos para las familias y las comunidades.
P2ITM destaca la importancia de reducir la exposición a toxinas como un paso vital pero a menudo pasado por alto en la preparación para el embarazo, junto con optimizar la salud de las mujeres y priorizar la atención de maternidad.
Los tóxicos potenciales se encuentran en el aire que respiramos, el agua que bebemos, los alimentos que consumimos y los productos que usamos. Entre ellos se incluyen:
Algunos ejemplos de CMR incluyen ftalatos, PFAS y retardantes de llama, productos en nuestra vida diaria.
Los ftalatos son productos químicos sintéticos ampliamente utilizados para aumentar la flexibilidad de los plásticos, disolver productos químicos y estabilizar fragancias en productos de cuidado personal. Están en la mayoría de nuestros productos de cuidado personal, como productos para el cabello, cremas faciales y maquillaje. ¡Incluso se encuentran en tubos y dispositivos médicos, cortinas de ducha y tapicería! Los ftalatos se asocian con parto prematuro, hipertensión en el embarazo, interrupción del desarrollo de órganos reproductivos como hipospadias y criptorquidia, o pubertad temprana, trastornos del comportamiento como el TDAH y un desarrollo deficiente del lenguaje.
Los pesticidas están relacionados con abortos espontáneos, muertes prematuras, trastornos graves del neurodesarrollo en niños y disfunción reproductiva en adultos. Son disruptores endocrinos que pueden impactar la ovulación y los espermatozoides, interfiriendo con la concepción. A menos que sigas concienzudamente una dieta orgánica, estás expuesto a pesticidas.
Las sustancias per- y polifluoroalquilo (PFAS), comúnmente llamadas “productos químicos para siempre”, son compuestos sintéticos ampliamente utilizados en productos de consumo debido a sus propiedades resistentes al agua y a la grasa. Se encuentran en todas partes, y reducir la exposición es difícil. Los PFAS se encuentran en utensilios de cocina antiadherentes, envases de alimentos, ropa resistente al agua y desechos industriales. Pueden causar fertilidad reducida, parto prematuro, hipertensión en el embarazo y trastornos tanto del neurodesarrollo como del sistema inmunológico en el feto y los niños.
Recomendamos tomar un suplemento prenatal con ácido fólico al menos tres meses antes de la concepción para un efecto óptimo. Un buen suplemento prenatal debe incluir vitaminas y minerales esenciales para apoyar el desarrollo fetal.
Por ejemplo, el yodo es crucial para la función tiroidea y el neurodesarrollo; hierroes necesario para el neurodesarrollo fetal y postnatal normal y para una amplia gama de procesos fisiológicos, además de reducir la anemia materna y los riesgos de complicaciones del embarazo. La colinaes un nutriente esencial para la estructura de la membrana celular, la neurotransmisión y la función muscular, mientras que ácidos grasos omega-3 son fundamentales para el desarrollo del cerebro fetal y la retina.
Los suplementos prenatales variarán en la cantidad y tipo de vitaminas y minerales que contienen. Nuestras organizaciones médicas brindan recomendaciones sobre el contenido óptimo de vitaminas prenatales.3
Sin embargo, la preocupación más seria es que no existe un requisito reglamentario para las pruebas de postproducción para asegurar al consumidor que las vitaminas prenatales son seguras y contienen los ingredientes enumerados en la dosis indicada: cada vitamina especifica lo que contienen y la cantidad de cada ingrediente supuestamente en ellas.
La Oficina de Contabilidad del Gobierno de los Estados Unidos (GAO) explica: “A diferencia de los medicamentos, los suplementos dietéticos, incluidos los de atención prenatal, no tienen que ser evaluados por la Administración de Alimentos y Medicamentos para determinar su seguridad o eficacia antes de llegar a las tiendas”.4
La investigación ha demostrado que muchas vitaminas no contienen los ingredientes enumerados, y algunas incluso carecen del ácido fólico esencial tan fuertemente recomendado. Un muestreo de 26 vitaminas prenatales de uso común, incluyendo una marca de prescripción, encontró que 40% excedió el nivel establecido de toxicidad por plomo. Se detectaron elementos tóxicos como aluminio, titanio, talio y níquel en cada muestra.5
Igualmente preocupante es que las pruebas de vitaminas prenatales muestran contaminación con productos químicos tóxicos, como plomo, mercurio, cadmio, arsénico, uranio, pesticidas y ftalatos. La GAO de Estados Unidos, en 2024, llegó a afirmar que las vitaminas prenatales actuales podrían dar lugar a que las mujeres tomen demasiados o muy pocos suplementos o estén expuestas a tóxicos innecesarios. Su conclusión decía: “El alcance limitado de la supervisión de la FDA sobre los suplementos dietéticos, incluidos los suplementos prenatales, podría conducir a resultados de salud desfavorables para las poblaciones vulnerables (es decir, las personas embarazadas y los fetos)”.
La Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) revisó estas preocupaciones sobre las vitaminas prenatales. La FIGO reconoce que las vitaminas prenatales se prescriben rutinariamente a las mujeres antes, durante y después del embarazo para mejorar el estado nutricional de la madre y la salud del feto. Reunían a un grupo global de científicos e identificaron qué sustancias químicas NO deberían encontrarse en los productos utilizados por las mujeres embarazadas, particularmente las vitaminas prenatales.6 En octubre de 2023, emitieron un comunicado pidiendo la certificación de todas las vitaminas prenatales que incluían pruebas para veinticuatro metales pesados, 120 pesticidas, microbianos, alérgenos y otros tóxicos. ¡Esta lista también tiene el potencial de cubrir la exposición a productos de cuidado personal, alimentos y envases!
¿No está ya en marcha la certificación de vitaminas? No, no se requiere certificación de vitaminas prenatales. Como declaró la GAO, la FDA carece de la supervisión para realizar evaluaciones de postproducción de vitaminas. ¡Esto significa que las “pruebas de terceros” son una necesidad!
Actualmente, existen estándares establecidos por la Farmacopea de Estados Unidos (USP) donde los suplementos se verifican mediante pruebas y evaluación. El Programa de Verificación de Suplementos Dietéticos de la USP (“DSVP”) requiere el cumplimiento y premia el uso de la Marca “USP Verified” en su etiqueta para indicar que la USP ha probado y verificado que el producto cumple con los estándares de calidad pública de la USP.7 USP lleva a cabo una vigilancia anual donde los productos se extraen de los estantes de las tiendas y se prueban para ayudar a garantizar que continúan cumpliendo con los estándares de calidad, pero no prueban todos los lotes. Sólo cuatro metales y algunos productos químicos en la lista FIGO son evaluados con la USP.
NSF International (anteriormente la Fundación Nacional de Saneamiento) comenzó en 1994 como una organización independiente y acreditada que desarrolla estándares de salud pública y programas de certificación para probar y certificar productos y sistemas diseñados para proteger los alimentos, el agua, los productos de consumo y el medio ambiente del mundo.8
La NSF ofrece certificaciones de productos e ingredientes para suplementos. La marca verificada por la USP significa que un producto ha sido probado en busca de ingredientes y contaminantes. USP y NSF certifican la seguridad de los productos, lo cual es un paso regulatorio crucial.
Sin embargo, no están buscando preocupaciones específicas con respecto a la seguridad para el embarazo y el desarrollo fetal, y es ahí donde P2iTM, basado en el estándar FIGO, es el estándar de seguridad más alto recomendado y uno que creemos que debe seguirse.
El estándar FIGO para las vitaminas prenatales es que NINGÚN nivel de un tóxico puede considerarse seguro, ¡especialmente cuando las mujeres tienen muchas fuentes de exposición durante un día determinado! Ni USP ni NSF requieren 24 metales pesados, 120 pesticidas. Tampoco requieren el nivel cero (de minimus) medible requerido por la norma FIGO. Son buenos, ¡pero no lo suficientemente buenos para la salud de las mujeres y los niños!
La lista FIGO es mucho más completa que USP o NSF.
Referencias:
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